El arcoíris aparece en el cielo gracias a la refracción y la reflexión de la luz solar en las gotas de agua originadas por la lluvia.

El arcoíris es un fenómeno meteorológico y se presenta en forma de arco de luz multicolor, por la refracción de la luz solar (luz blanca) en las gotas de lluvia que están suspendidas en la atmósfera. Para que se dé la formación de un arcoíris tiene que llover, existir la presencia de luz solar, que la luz del sol atraviese las gotas con un ángulo determinado y el sol se encuentre siempre a su espalda. El arcoíris puede aparecer en cualquier lugar donde haya humedad en el aire, por ejemplo, cerca de las salpicaduras de un río o por el rocío del mar, y con el sol ubicado en una posición concreta: a menos de 42º por encima del horizonte. Los tipos de arcoíris dependen de diferentes condiciones atmosféricas, y entre los principales se destacan: Arcoíris primario: Es el más conocido y suele aparecer luego de una tormenta o en zonas de pendiente de agua que salpican, como una catarata.
Arcoíris secundario: También denominado “arcoíris doble”, se forma por encima del arcoíris primario, con los colores invertidos.
Arcoíris supernumerario: Es raro de ver y consiste en la proyección de varios arcoíris tenues en simultáneo, producto de la difracción de la luz del sol.
Arcoíris rojo: Conocido también como “arcoíris monocromo”, se forma después de la lluvia y durante el amanecer o el atardecer, con el sol ubicado muy bajo o cerca del horizonte.
Arco circunhorizontal: También conocido como “arcoíris de fuego”, aparece en muy pocas ocasiones y se forma a partir de pequeñas gotas de agua en las nubes cirros, donde el espectro de colores se proyecta (en lugar de aparecer en forma de arco).
Arcoíris gemelo: Es muy raro de ver y se proyecta con dos arcos que, a diferencia del arcoíris secundario, se originan en un único punto base y sus colores no se invierten.
Comments