La asociación internacional IASE inicia operaciones con la meta de convertirse en la referencia para que los trabajadores y ejecutivos se certifiquen en materia de gobernanza y economía sustentable. Incluso las petroleras lo reconocen (las globales, no Pemex): el futuro será sustentable y las energías renovables terminarán por sustituir a los hidrocarburos, aunque el cambio ocurrirá muy lentamente. Pero ya se preparan para el cambio. ExxonMobil, la petrolera privada más grande del mundo, posee una granja de algas en el sur de California, donde investiga su uso para producir petróleo renovable a partir de la luz solar y del dióxido de carbono. Y la británica BP tiene un plan para alcanzar el 50% de su generación de energía a partir de combustibles no fósiles para 2030.
La economía sustentable es más que una moda: es una tendencia a la que se están subiendo —para no bajarse— cada vez más compañías. Igual que ellas, los colaboradores y los ejecutivos deben estar preparados para la nueva realidad, y a ellos se dirige IASE (International Association for Sustainable Economy), una asociación civil sin ánimo de lucro que certificará a los profesionales en materia de ESG, las cifras en inglés de Medioambiente, Social y Gobernanza. IASE está presidida por Javier Manzanares, 'deputy executive director' del Green Climate Fund, el mayor fondo de inversión sustentable del mundo, perteneciente a Naciones Unidas. En México, su encargado es Rodrigo Manrique, que cuenta en entrevista los objetivos de esta nueva asociación que acaba de arrancar sus operaciones en 25 países. Expansión: ¿Qué es IASE?
Es la primera entidad certificadora a nivel mundial que acredita a los profesionales en materias de ESG (Environmental, Social y Governance, y nosotros le añadimos Gender, todo el tema de inclusión y equidad de género). ¿Y esto para qué? Para que los profesionales tengan una mejor preparación en conocimientos y competencias que tengan que ver con economía sostenible.
Entonces, nosotros estamos comprometidos con la promoción de la formación académica para cualquier profesional. Lo que hemos hecho es poner unos estándares para poder certificar a los profesionales. ¿Qué quiere decir esto? Que los profesionales que cursen y aprueben la formación en economía sostenible para ser certificados por IASE, van a ser validados internacionalmente. Esto incrementará sus oportunidades de carrera y su reconocimiento a los ojos de las compañías. Tenemos que formar a los profesionales en estos temas, porque de esa forma las empresas van a incorporar en su toma de decisiones, y en el diseño de los procesos propios de su negocio, los principios de ESG, una innovación constate, una inclusividad en el ámbito laboral, y por supuesto una contribución en la lucha contra el cambio climático.
Cada vez más empresas se suman a iniciativas sustentables. ¿La asociación nace en el momento en que mejor se podrá aprovechar esta tendencia?
Sin lugar a dudas. Esta contingencia sanitaria nos ha ayudado a replantear la manera en que se hacen los negocios, y el sector empresarial y de gobierno tienen una mayor conciencia a sobre la economía sostenible. Vamos a salir de esta crisis mejor parados, con mejores prácticas, con mejor gob corporativo y prácticas anticorrupción. México tiene una oportunidad tremenda para mejorar. Queremos transformar a las empresas a partir de que sus profesionales estén certificados en ESG. Y y de ahí nace esta asociación en 25 países, como Estados Unidos, Alemania, España, Canadá, China, la India, Grecia, Portugal, Sudáfrica, Rumanía, Colombia o México. Pero queremos llegar a más. El Green Climate Fund, que nos apoya fuertemente, está en 147 países, y por supuesto el objetivo es llegar a todos eventualmente.
¿Qué retos tiene para poder crecer en México?
Hay tres pilares importantísimos que debemos de tener bien puestos para que esto salga adelante. El primero tiene que ver con sumar a las instituciones, reguladores, asociaciones y cámaras que tienen poder de convocatoria masiva, porque tienen muchos agremiados, considerando también al gobierno. El segundo es el mundo de la academia, las instituciones de educación, investigación y ciencia, que nos van a dar el soporte técnico sobre los beneficios de la economía sostenible. En este sentido, estamos buscando alianzas con universidades y con modelos educativos online. Y por supuesto, el tercer pilar fundamental para que tengamos éxito es la iniciativa privada. Queremos promover, junto con las compañías, que los profesionales de cualquier giro puedan adquirir los conocimientos, la competencias y la mentalidad de la economía sostenible como benéfica para lograr mejores resultados para la empresa.
Hay estudios muy claros sobre el rendimiento de fondos ligados a ESG, que tienen mejor desempeño que otros, igual que los índices sustentables en las Bolsas.
¿En qué se diferencia el ESG de la responsabilidad social?
El concepto tradicional de responsabilidad social es absolutamente válido y todavía vigente, pero las acciones que una empresa decide hacer por la sociedad o el medioambiente, muchas veces no tienen que ver con los procesos intrínsecos de su negocio. Está bien que una empresa que haga zapatos ponga una fundación para ayudar a chicos a que cursen la primaria, pero además de eso, debe integrar la visión sustentable y de gobierno corporativo a todos sus procesos: a la hora de seleccionar a sus proveedores, los materiales, el consumo de recursos para sus procesos productivos, su comunicación, el manejo de su basura... Para poder tener un verdadero efecto, tienes que integrar el tema ambiental y social a tus procesos de negocio.
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