UN EXPERIMENTO DEMOSTRÓ QUE LOS COLIBRÍES Y OTROS ANIMALES TIENEN LA CAPACIDAD DE PERCIBIR MILLONES DE COLORES MÁS QUE LOS HUMANOS.
El ojo humano posee aproximadamente 110 millones de células diferenciadas en tres tipos llamadas conos, cada uno especializado en captar luz roja, verde y azul.
Estas células se encuentran en la retina y se encargan de captar las variaciones en las longitudes de onda que provocan las distintas partículas de luz (fotones). La señal de cada tonalidad se traduce en impulsos eléctricos que se procesan en el cerebro y dan como resultado una visión a color.
Y aunque no existe un número preciso de colores que el ojo humano puede captar debido a que se trata de una experiencia subjetiva, se considera que la capacidad anatómica a partir de los tres tipos de conos (conocida como tricromatismo) nos permite distinguir cerca de un millón de tonalidades distintas.
Sin embargo, tal y como ocurre con el olfato o el oído humano, existen otras especies en el reino animal con una visión más desarrollada que les permite ver colores que los humanos ‘sólo podemos imaginar’.
Esta fue la conclusión de una investigación realizada por la Universidad de Princeton, que probó la percepción de colores de los colibríes colianchos (Selasphorus platycercus) en estado salvaje mediante dos comederos en los que se intercambiaba agua y agua con azúcar.
“Los humanos son daltónicos en comparación con las aves y muchos otros animales”: así define Mary Caswell Stoddard, profesora del Departamento de Ecología y Biología Evolutiva en la Universidad de Princeton, la diferencia cromática entre el ojo humano y el de otros seres vivos, como las aves.
Las pruebas que involucraron a 6 mil colibríes demostraron que son capaces de percibir colores que escapan del espectro electromagnético visible para los humanos, diferenciando entre tonos ultravioleta+verde del verde y del ultravioleta, (que para nuestros ojos lucen idénticos y en el caso del ultravioleta, no se aprecia nada).
Los colibríes también reconocieron combinaciones de ultravioleta+amarillo y ultravioleta+rojo, además de distinguir entre un par de tonalidades de ultravioleta con luz roja visible de distinta intensidad.
La razón detrás de su capacidad cromática es que a diferencia de los humanos, las aves poseen un sistema de visión tetracromático, compuesto por cuatro clases de células especializadas en captar colores, un tipo más que el ojo humano.
Esta condición no sólo les permite captar la luz ultravioleta (una longitud de onda debajo del espectro visible para los humanos), los científicos a cargo de la investigación también creen que los colibríes y otras aves pueden percibir más combinaciones como ultravioleta y rojo, o ultravioleta y verde.
Según el estudio, la tetracromía es una condición de distintos animales vertebrados: “Este sistema de visión de color es la norma en aves, algunos peces y reptiles, y es casi seguro que existió en los dinosaurios. Consideramos que la capacidad de percibir muchos colores fuera del espectro (visible para humanos) no es sólo una capacidad de los colibríes, sino una característica generalizada de la visión a color de los animales”, explica Stoddard.
Comments