La próxima vez que vayas a Cancún no dejes de visitar el Santuario de María Desatadora de Nudos, una iglesia única en su tipo en México y en el mundo donde se respira paz.
Enclavada en la selva quintanarroense se encuentra un santuario único en su tipo en México, un verdadero edén donde la paz reina y los milagros son concedidos gracias a la intercesión de la Virgen María Desatadora de Nudos.
La advocación a María Desatadora de Nudos no ha sido la única razón por la que los fieles quedan extasiados con la visita a este santuario, es también la atmósfera de este lugar lo que llena de paz a quienes llegan aquí.
Este santuario y parroquia se encuentra retirada del bullicio de la zona hotelera de Cancún, en el área de Jardines del Sur. Aquí, fieles de todas partes del mundo llegan para conocer a la virgen y pedirle milagros.
“María Desatadora de Nudos es una virgen a la que la gente tiene mucho cariño, mucha devoción. La idea de ponerle listones con sus peticiones hace muy visible la fe, y muy sensible a los los ojos de las personas”, nos explica el padre Luis Pablo Garza, párroco y fundador de este santuario.
Contacto con lo divino
El terreno donde actualmente se ubica el santuario era selva virgen y su construcción se adaptó perfectamente a su ambiente. La arquitectura de este espacio de devoción es rústico, elaborado en su totalidad de madera y con un estilo caribeño, oriental y místico.
Este santuario de diseño ecológico, con caminos entre la selva, se la vuelto un lugar de meditación y oración, pero también de inclusión, y es que de acuerdo con el padre Luis, “a este lugar han llegado personas que estaban alejadas de la iglesia o que tienen otros credos, y eso lo ha convertido en un lugar muy especial”.
“La gente que llega aquí siente algo muy especial , siente una paz grande y el contacto con la naturaleza ayuda mucho a las personas a encontrarse con Dios. El hecho de caminar entre los árboles te hace sentir al Creador; eso es algo muy bonito”, agrega.
Uno de los aspectos que llama más la atención de los visitantes es que la bienvenida al santuario la dan cientos de listones blancos que se encuentran atados por todos lados y donde los fieles escriben sus intenciones o dificultades.
Cuando el milagro es concedido, los devotos regresan y colocan un listón de color con el agradecimiento. “Tantas personas han venido a agradecerle a la virgen, que se tuvo que construir La Plaza de los Agradecimientos, para que ahí se pudieran colocar los ahora miles de listones de colores que dan gracias”, explica Garza. “Tenemos milagros de salud, de personas que no se habían podido embarazar, de reconciliaciones familiares, de esposos, de trabajo… hay cuestiones de todo tipo que le confían un nudo, y que se lo atribuyen a esta devoción. Milagros físicos, morales, espirituales”.
Turismo religioso en Cancún
En los tres años que tiene de existir el Santuario María Desatadora de Nudos en Cancún se ha convertido en un nuevo punto de interés para los viajeros que buscan más que playa, y es un lugar muy visitado tanto por mexicanos como por extranjeros.
A raíz de la serie de Netflix Me llamo Francisco, donde el Papa Francisco habla sobre ella, así como en la serie Padre Jorge, mucha más gente ha llegado hasta este lugar con el impulso de conocer de cerca esta advocación mariana.
Actualmente, fieles de todo el mundo se acercan tanto para conocer a la virgen y pedirle su intercesión, como para realizar bautizos, primeras comuniones, bodas, renovaciones matrimoniales o incluso para realizar misas especiales con sus propios Padres. Aquí, incluso se han ofrecido misas en chino.
Virgen milagrosa
El padre Luis Pablo nos contó que esta virgen alemana data del siglo XVII y es una de las advocaciones de la Inmaculada Concepción de María, que se celebra el 8 de diciembre.
Se dice que esta virgen se pintó para agradecer el milagro de una pareja que pasaba por una fuerte crisis. En aquella época, cuando se casaban los esposos, se les amarraban las manos con un listón como símbolo de comunión de vida.
Ese listón era guardado como un símbolo de amor entre la pareja. La esposa, con cada problema conyugal que atravesaban, le hacía un nuevo nudo al listón, que con el paso del tiempo quedó lleno de nudos. Cuando la pareja acudió a la virgen para pedir su intercesión con el fin de sanar su relación, se desataron todos los nudos y pudieron vivir felices y en paz, tuvieron hijos, nietos y fue justo uno de sus nietos quien para agradecer el milagro, mandó a pintar la imagen de la virgen.
La pintura fue hecha por Johann Georg Melchior Schmidtner en 1700 y “tiene toda una teología y espiritualidad matrimonial. Esta virgen es una advocación que representa a la Inmaculada Concepción con una corona de dos estrellas en su cabeza, una luna bajo sus pies y el lazo que tiene entre sus manos”, nos explica el padre Luis y agrega que la imagen original se encuentra actualmente en la iglesia de San Peter am Perlach en Augsburgo, Alemania.
Virgen peregrina
La imagen de la María Desatadora de Nudos o Nuestra Señora Knotenlöserin (como se le conoce en alemán) se difundió discretamente por todo el mundo durante estos siglos, pero de acuerdo con el padre Luis, no fue sino hasta hace unos 35 años cuando el Papa Francisco conoció a esta virgen cuando era sacerdote jesuita y fue enviado a estudiar a Alemania. A su regreso a Argentina empezó a difundir la imagen. La imagen se venera en la iglesia de San José del Talar y en el Mar de la Plata hay una gruta de la virgen.
¿Cómo es que esta virgen llegó a México? El padre Luis nos relata que un piloto llevó la imagen de Argentina a Brasil y fue ahí –hace unos 10 años– que él la conoce.
Hace unos años atrás, en México, el obispo de Quintan Roo, Pedro Pablo Elizondo, invitó al padre Luis Pablo Garza a construir una iglesia en esa zona de Cancún, que ha empezado a crecer mucho en los últimos tiempos.
“El obispo me dijo que eligiera a quién se la quería dedicar y yo le dije: a María Desatadora de Nudos”, recuerda Garza. “Le propuse esta devoción porque le tengo mucho cariño, pero sobre todo, porque vi que le iba a hacer mucho bien a las personas en este mundo moderno, en la situación de Cancún y del mundo”.
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